Comienza el partido y lo primero que me pregunto es ¿Por qué tan atrás?, si bien Curicó no tuvo un partido espectacular, tampoco pasó desapercibido, fue protagonista en ataque y llegó al arco del Cacique en más de 10 ocasiones y se puede decir que nos salvamos.
A los dirigidos de Luis Marcoleta les faltó precisión a la hora de concretar, mientras que Colo-Colo no hizo más que destacar con una que otra salida rápida, pero eso no fue suficiente, el cuadro albo debe demostrar más que eso.
Veníamos bien anímicamente desde el clásico contra Universidad de Chile, pensé por un momento que desde ahí no nos pararía nadie y este partido, en donde además era el redebut de Héctor “tito” Tapia en la banca de Colo-Colo, la reincorporación como titular de Julio Barroso, era hora de ponernos al día con el campeonato nacional, de no dejar escapar ningún punto, Ya nos hemos farreado bastantes.
El trabajo de la defensa de ColoColo no fue malo, al contrario, Barroso tuvo un buen desempeño en el partido, pero sigo sin encontrar la razón del mezquino y discreto juego de los albos en La Granja, no me lo esperaba, quizás la línea de 3 no fue la mejor opción.
Tal vez influyó que no estuvieran en la cancha jugadores como Jorge Valdivia, ya que sin su presencia, Colo-Colo pierde la creación de juego, debo recalcar que no hay un reemplazante de sus características, es por esta razón que el circuito en la cancha se vio cortado, simplemente por la carencia de un 10. Solo rescato que el cacique aguantó el empate e impidió una derrota.
Notablemente falta un mayor poder ofensivo, el desempeño de Felipe Campos y Gabriel Suazo dejaron bastante que desear, Tapia en un acto desesperado, tuvo que recurrir a la banca e ingresar a Jaime Valdés y Esteban Paredes, los que estaban guardando energías para lo que será el encuentro de Copa Libertadores ante Delfín de Ecuador. Pero bueno, no quedó otra al ver que Morales y Carvallo no respondieron al partido. Queda demostrado una vez más que Colo-Colo no tiene una banca al nivel que debiese ser.
Solo queda dejar atrás este opaco partido del Cacique y mirar hacia adelante. Como hinchas no debemos bajar los brazos, amamos este club y su historia profundamente, apoyemos, sigamos yendo al estadio a cantar con más fuerza, mañana se viene un partido trascendental por el certamen internacional que debemos ganar y el popular nos necesita más que nunca colocolinos.