Lo primero es lo primero y considero una completa falta de respeto lo ocurrido en Ecuador a la hora del encuentro, es un certamen internacional y estas cosas no están a la altura de aquello.
Que las instalaciones del estadio no estén funcionando del todo bien y que se tenga que retrasar el partido, es insólito y espero que no se vuelva a repetir.
Y nos vamos al fútbol, desde el pitazo inicial Colo-Colo me sorprendió y me dejó un sabor dulce en la boca, tuvimos la pelota todo el tiempo, atacamos, presionamos, tan bien, que la apertura de la cuenta no tardó en llegar, de la mano de Jaime “pajarito” Valdés en el minuto veinte.
Seguimos dominando, algunas oportunidades desperdiciadas, hasta que en el minuto cuarenta, se cobra penal sobre Valdivia y consecuencia de esto, cae el primer expulsado en el equipo local. Patea Paredes y anota para igualar a Chamaco Valdés con veinte goles en Copa Libertadores, como Esteban Efraín Paredes, no hay.
Volvemos del descanso y al cacique se le vio con una actitud y juego diferente, tanto así que en el minuto treinta del segundo tiempo, Delfín pilla mal parado a los albos y anota el descuento. Qué manera de cambiar después del entre tiempo, fue muy notorio y por esa razón terminamos sufriendo innecesariamente.
Este partido debió ser ganado por muchos más goles por el popular, además lo necesitábamos, fuimos superiores y tuvimos que aprovechar también que el equipo local jugaba con uno menos y lo desperdiciamos, no podemos seguir perdiendo oportunidades de gol.
Pese a ser un encuentro totalmente dominado en el primer tiempo, en los descuentos, nos volvió a penar el fantasma de la eliminación en este certamen.
Quiero ver siempre al Colo-Colo que vi en el primer tiempo, que predomine el juego ofensivo, que salgamos como perros a buscar los partidos, si hubiesen jugado de esa forma todos los compromisos anteriores de Copa Libertadores, no estaríamos en esta situación. Pero bueno, pasaron muchas cosas en Colo-Colo de manera interna y hoy solo importa que estemos más vivos que nunca y que la hinchada siga alentando porque como ya se sabe, de atrás pica el indio.